Ayer en nuestra cita de los miércoles hemos hecho un "pastel" de diálogos. Hicimos la base hablando de depresión, de nostalgia, de añoranza..., nuestra psicóloga "enriquecedora", nos enseñó, que ha pesar de haber vivido una vida mucho mas intensa y mas dura que nosotras, con una guerra de por medio, con la huída de su pais, con el problema del idioma, el trabajo, la crianza de un niño pequeño, viniendo de una vida desahogada, mas bien de lujo, nos enseño, que su alma llora diariamente por una madre y unas hermanas que dejó alli, y que no sabe cuando podrá volver a ver, pero que todos los días intenta ponerse su mejor sonrisa y "tirar pa alante" porque ella sabe mejor que nadie, lo que es caer en una depresión.¡Esta es nuestra chica! Añadimos al "pastel" otro ingrediente: las personas negativas tienen mas propensión a la depresión que las personas positivas. Tres opiniones iguales. Y en la mente de las tres, la pregunta ¿como llevariamos nosotros la situación de ella?Creo que las tres, sin decirnoslo solo con el pensamiento, nos sentimos orgullosas de ella. Llegábamos ya al "merengue", y alli, después de narrarles la historia de unas personas muy, muy especiales, coincidimos, que contar con seres como éstos en nuestra vida, es un lujo, una suerte y una maravilla.Para mi, particularmente, es todo un privilegio contar con su amistad. La "guinda del pastel" llegó cuando por primera vez servimos, "bien", las infusiones, "con la tapa levantada, de prisa, y de golpe" ¡¡¡¡Lo conseguimos!!!! Y este "pastel" variado, entre risas, quedó listo para ser horneado.
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