CARTA A MI MADRE

Querida mamá:

Un año más me dispongo a soñar por unos momentos e imaginar que vives en la distancia, que esperas con impaciencia mis cartas y que sonriendo al leerlas, tendré respuesta a vuelta de correo, y aunque sé que es sólo eso, un sueño, espero como todos los años éste día, en el que, por unos instantes, como un hada madrina, congelo el tiempo a mi entera disposición y te veo sentada, leyendome.

¡¡Bueno, ahora si que estarás contenta, ya estais las cuatro hermanas juntas!! Como siempre habeis estado y espero que cuideis de toda la familia y nos inculqueis esa unión que vosotras teníais y que a nosotros, a veces, nos cuesta mantener. Dile a la tía Marga, que esté tranquila, que junto a Angelines, cuidaremos de Maruja, que está bien, que ya está totalmente integrada en la residencia.
¡¡Si se ha puesto pantalones, y hasta juega al Bingo!!

Allí se acuerdan mucho de ella, dile que se nos hace un mundo a las tres, no verla al entrar en la habitación, y que nos ha dejado tantas y tantas cosas que imitar y corregir.....pero que estamos contentas, por que al fin descansa con sus hermanas.

Las cosas aqui, no pintan nada bien, tenemos crisis económica, mucho paro y desilusión.
Es una época total de vacas flacas y hay que intentar superar esta etapa echándole ganas y buen humor.
¡¡Que te voy a contar a ti de etapas con dificultades!!
Y siempre te vi, con una sonrisa, como a la tía Marga, ni una palabra de desaliento..., asi que, ya nos estais mandando fuerzas, para ponernos la sonrisa al levantarnos y tirar hacia delante sin decaer.

También tenemos buenas noticias, ¡¡Pili va a ser abuela!!.
Si mamá ¿te imaginas? tu niña chiquitina va a tener una nieta, y está loca de contenta, no para de hacerle cositas y mas cositas; se va a llamar Sofía y dentro de poco más de dos meses, la tendremos aquí.
Tus otros dos bisnietos, Richi y María, andan ahi, peleando con la vida y aprendiendo su vivir, que no es poco. Richi aunque despacito, cada vez va mejor y María acaba de cumplir un añito y está preciosa.

Tus nietos son ahora los que tienen que levantar su mundo y lo tienen bastante dificil dada la situación...pero cada uno va buscando su dirección y poquito a poco, la irán encontrando y entonces será más facil el camino.
Nosotros, sus padres, intentamos dirijirles hacia la ruta adecuada, apoyándoles, animándoles, ayudándoles a crecer, siempre a su lado, al borde del camino, o bien caminando junto a ellos y algunos necesitan de vez en cuando, nuestra mano siempre tendida.

Los demás andamos de aqui para allá, cada uno de nosotros con lo nuestro, cada vez un poco mas viejos y tercos, pero creo, o quiero creer, que todos nos miramos en ti, y de vez en cuando, pasamos página a propios y ajenos errores y empezamos de nuevo con linea recta y tranquila, esa escritura invisible que nos comunica, intentando que tenga los mínimos borrones y tachaduras.


Y yo..¡que quieres que te cuente de mi, mama!, que quiero que siempre estés ahi para mi, que va pasando el tiempo y hay cosas, que no se que hacer y hay días que me siento mayor, muy mayor y entonces te pregunto bajito, ¿mamá, tu te sentías alguna vez asi?.

Y te veo en goya con las tias, y te veo en verano con nosotros en alicante y te veo con papa y los chicos por Lecaroz...Hay dias que tengo respuesta...pero otros no...entonces, cierrro muy muy fuerte los ojos, esos que tu me decias que los tenia pequeños de tanto llorar, y que a veces siguen llorando, pues esos, los cierro y simplemente te siento..., siento tu risa, tu voz, tu olor ....y poco a poco me encuentro mejor, y me entran ganas de crecer...de seguir adelante.

Tengo un proyecto de felicidad.
Me he puesto, como meta principal en mi vida, SER FELIZ,asi, con mayúsculas.
Con pequeños detalles, en el quehacer cotidiano, con y atraves de la gente que me cruzo en el día a día, junto a las personas que quiero, disfrutando de lo que me gusta y aceptando lo que no me es agradable; sin necesidad de grandes proyectos, solamente con lo que me viene, bueno y malo, sacando ese poquito de felicidad que cabe en la palma de una mano, pero que a mi, me llena el corazón. Y en ello estoy, mamá.
Se que estas ahí para todos, seguro, pero yo quiero creer que siempre, siempre, estas y estarás, para mi.

Un beso muy muy fuerte y hasta el año que viene.